Presentación cartel del señor de la Humillación y María Santísima de la Estrella
Señores Hermanos Mayores, cofrades, amigos. Hoy estamos aquí para asistir a la presentación de un cartel que recoge, como no podría ser de otra manera un motivo especial, destacado, singular y personal de nuestra Semana Santa. No se cuantos carteles se han presentado ya a estas alturas de la cuaresma. Tampoco se, si tiene sentido esta serie de actos concatenados a los que asistimos cada año. Pienso que esta parafernalia cuaresmal cobra relevancia y razón de ser en tanto en cuanto aportemos elementos creativos, como es el cartel en si mismo, o el mensaje sustentado en la palabra. Es decir, todo esto tendrá sentido si logramos dotar de contenidos a las expresiones que aquí se exponen. Es necesario, en este tipo de actos, que el autor del cartel aporte un mensaje, comunique un sentimiento a través de sus pinceles, y que el presentador, a su vez, favorezca la reflexión en base a unas ideas. Es por tanto esta presentación un acto subjetivo, metafórico, y parcial, razón por la cual pido disculpas de antemano. Digo que el autor del cartel, Bernardo Gutiérrez Benítez, como cada creador, quiere aportar un mensaje con su obra y en este caso, como buen comunicador, es un mensaje breve, simple en su concepción pero grande en su fondo, fácil de comprender, directo y sentido. Aquí en el cartel de la hermandad del Cristo de la Humillación y María santísima de la Estrella del año dos mil, ambas imágenes tienen protagonismo queriendo el autor destacar especialmente, y por eso lo sitúa en primer termino, a nuestra derecha, al Cristo de la Humillación en un acto de solidaridad por quien, en muchas ocasiones, queda eclipsado ante la deslumbrante compañía de su madre, cargada de una belleza dulce y profunda que el pintor coloca en un mismo plano pero en un segundo termino. Ambas imágenes mantienen la mirada caída, inclinada. El cartel soporta sobre un eje imaginario la portentosa fuerza expresiva de los ojos de la dolorosa y de su hijo. Un eje de dolor y sentimientos, sobre el que nuestra vista cabalga pudiendo captar en una sola mirada la expresividad de ambos titulares.
Un ángulo de dolor unido sobre un vértice en el que confluyen el rostrillo de la madre y el pelo caído del hijo. No existe, porque huelga su presencia, cualquier otro aditamento que distraiga, confunda o reste protagonismo a las imágenes, auténticos baluartes del mensaje y del cartel. Pero este presentador desea y cree conveniente detenerse en la solidaridad expresada por el autor con la figura, teoricamente, menos preponderante de esta dualidad, el Cristo de la Humillación. Si en este mundo y si en esta presentación algo puede tener especial significado es la defensa de la solidaridad y la necesidad de destacar los valores sustentados en la humildad. Mirad la cara del señor de la humillación en el cartel de este año, el pintor ha sabido plasmar la grandeza de esta figura salida de las manos del malagueño, Francisco Palma Burgos, ha sabido comunicar su majestuosa humillación, su extraordinaria humildad de hombre, aceptando el castigo para darnos ejemplo. Objeto de la burla y el escarnio público. El señor de la Humillación esta aquí entre nosotros para hacernos reflexionar, para darnos ejemplo, Su presencia, con la mirada al suelo, bajo una pobre túnica blanca, nos habla de sencillez, de sinceridad, nos pide que le sigamos que ocupemos un lugar a su lado, ,,,,si somos capaces. A veces es bueno, y hasta necesario, preguntarnos que hacemos nosotros aquí en la presentación de un cartel, es un acto más .y de hecho lo será si nosotros no tratamos de impedirlo. Y no será un acto más si miramos a la cara del señor de la Humillación y tomamos su ejemplo. Y le preguntamos que nos pide, qué espera de nosotros ¿ nos pide protagonismo? Nos solicita a caso popularidad?, que quiere que hagamos por el , cual es su mensaje, Y me pregunto más aún ¿ que cargo ocupaba en la tierra el cristo?, era portavoz de algún grupo bien visto en la sociedad de entonces.¿ como eran sus ropas? lo vemos los malagueños cada martes santo rodeado de oro y riquezas. NO . la respuesta es no.
El señor de la Humillación pasea nuestra ciudad semidesnudo, descalzo, y entre la admiración de quienes le observan, porque mirarle seria solo una actuación vanal, al señor de la Humillación hay que observarle. Porque es el gran ejemplo que todos necesitamos. Solo en su dolor y sufrimiento. Solo en su paz y sosiego. Ha sabido huir de la tentación del poder, del ansia de protagonismo tan extendida hoy día. El señor de la humillación nos enseña a dejar paso y no a cortar el paso. Su mensaje es de unidad y hermandad. Sus palabras sirvieron para ayudar a los necesitados, para que se unieran los débiles, para crear hermandades. Quienes entiendan ese mensaje como enfrentamiento, división y búsqueda de protagonismo están sembrando de espinas el camino por donde deberá pisar el señor. La hermandad del señor de la Humillación y la virgen de la Estrella mantiene ese alo de rancio abolengo y prestigio que retiene como, en esencia, el sabor puro de nuestra Málaga, Un sentido sobrio, serio, sin contemplaciones a la galería. Su imagen en la calle consigue ese difícil reto de retrotraernos en el tiempo, llevarnos muchas décadas atrás. Revivir la Málaga de siempre, la que permanece en nuestra memoria. No puedo obviar en este momento el recuerdo del año 1972, era un niño el que esperaba al fondo de la Alameda la llegada de la única cofradía que había en la calle, allí estaban los bomberos, como siempre, y el nuevo trono de la virgen, Mi tía Juanita y yo nunca lo olvidaremos. Es una cofradía seria y rigurosa, ese debe ser su camino, su aportación al concierto cofrade de nuestra ciudad. Es determinante mantener su sabor, por su elegancia, su rotundidad. Merece la pena el esfuerzo, el esfuerzo en todos los sentidos, en el trabajo y en la humildad de ese trabajo. Los medios de comunicación jugamos hoy en día un papel destacado en la sociedad. A veces el hombre despojado virtualmente de sus valores más importantes, reflejados en la imagen del señor de la Humillación, se deja llevar por la parafernalia social de la apariencia. El yo hedonista, y figurante aparece y nos desborda. Este impulso rompe familias, rompe hermandades, nos despoja del más puro sentido cristiano y añade un nudo mas a las manos del señor.
En esta sociedad y en especial en las hermandades debemos hacer un esfuerzo por huir del protagonismo, de lo contrario estaremos alejándonos de aquel que da sentido a nuestras vidas. Estar junto al Señor de la Humillación es estar junto a los humildes, a los que dejan sus horas y su esfuerzo en el anonimato, junto a los marginados. El cartel que hoy presentamos esta lleno de humanidad, de una divina humanidad que aflora de la imagen del nazareno. Un cartel que expresa la claridad de ideas del autor, hombre autodidacta, que se gana la vida con sus manos arreglando lo que otros desarreglan, dando forma a lo deformado, y en sus ratos libres es capaz de plasmar la expresión de un cristo humillado para que todos admiremos su santa efigie. Bernardo estuvo a punto de dejar su vida en el camino hacia Santo Domingo. Hace cuarenta años, su fervor cofrade, le llevaba cada cuaresma de visita por las iglesias, el Señor de la Humillación quiso rescatarle de las garras de la fiera para que le pintara cincuenta años después. La historia es tan real como la imagen que podemos ver en la pintura. .Un león de un circo que era trasladado en una jaula, engancho el cuello de aquel niño que ensimismado, ante la cercanía de la iglesia de Santo Domingo no se percató de la presencia del animal, la garra del felino se clavó en su rostro, preso del dolor y perdido el conocimiento cayó desfallecido al suelo. Afortunadamente Bernardo Gutiérrez , que contaba entonces 9 años, se recuperó,,, y con él la Semana Santa ganó un creador. Su pasión estuvo a punto de costarle la vida, ahora parte de ella queda plasmada en cada pincelada. Y hoy cuatro décadas después el señor de la Humillación sigue en Santo Domingo, Él, que busco refugio en los lugares más inhóspitos del barrio para poder salir en procesión, que visitaba enfermos en las esquinas de su Perchel, jamás abandonó su entorno. Y ha visto como al igual que hicieron con Él, dos mil años después, un barrio era humillado, abandonado y destruido. Ha visto como su entorno natural ha ido cayendo piedra a piedra enterrado bajo la piqueta de la especulación y la arbitrariedad de intereses oscuros. Cuantas veces han temblado los pies del señor ante el hundimiento de las casas del viejo barrio. Pero ÉL permenece ahí. Las hermandades son seres vivos que trascienden la vida de quienes la conforman. Como los bosques, las estrellas, o los océanos. Están ahí contemplándonos a lo largo de los siglos, manteniendo el testigo de una devoción. Grandes incendios, talas indiscriminadas u otros cataclismos alteran , destruyen, o cambian la fisonomía de esos seres vivos que perduran a través de los tiempos; pero la vida vuelve a renacer, vuelve a brotar.
Es necesario atravesar un tiempo duro, a veces largo y complicado para volver a ver la inmensidad y la frondosidad de su ser, pero siempre el gran bosque centenario vuelve a nacer y vuelve a lucir con todo su esplendor, la vida , igual que la fe o la devoción echa raíces fértiles , incluso en las tierras más estériles. Lo importante es mantener la llama viva. Aunque a veces su intensidad sea menor. Las estrellas en el universo aparecen y desaparecen , hay estrellas fugaces, estrellas de la mañana, estrellas que son nuestro guía en el infinito, pero siempre están ahí para iluminar nuestro camino, nuestro rumbo, en este mar abierto de difícil orientación, de desconcierto y sosobra. la Estrella esta aquí para mantener el rumbo seguro, para orientarnos para consolarnos para dar luz a nuestra tiniebla. .Ahí esta nuestra Estrella , la que da sentido a nuestras vidas. Las estrellas pasan por momentos de menos intensidad en los que desde el infinito se aprecia un inquietante tintineo. Mirad al cielo por la noche y contemplareis miles de estrellas refulgentes , porque, como el bosque, la vida late intensamente en su interior, y esa vida volverá a resurgir con la mayor intensidad,, Pero debemos caminar con la misma humildad que el señor de la Humillación , el marca la senda que nos lleva a la estrella soñada, si nos apartamos de su ejemplo estamos haciendo mas oscura la noche. ANIMO HERMANOS DE LA ESTRELLA Y LA HUMILLACION. ENTRE TODOS FORMAIS UNA AUTENTICA GALAXIA QUE BRILLARA CON LA MAYOR INTENSIDAD EN EL CIELO INFINITO DE NUESTRA SEMANA SANTA. Animo porque vuestra constelación tiene la estrella más brillante, la más fuerte, la más luminosa. Cuando ella sale todas las estrellas quedan eclipsadas. Es la más intensa, la que alumbra nuestros corazones y hace día la noche, la más guapa, la más nuestra, María Santísima de la Estrella had que tu luz sea el faro que nos guíe. MUCHAS GRACIAS.
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Parte I: Lista dos objetos proibidos e aceitos sob condição para a importação (ou em trânsito) Seção I – Animais vivos e produtos animais Capítulo 1 Animais Vivos Posição Código SH Objetos proibidos Objetos aceitos sob condição Abelhas, bicho da seda e sanguessugas acompanhados de certificados zoossanitário. Ver Parte II, §§ 2 e 2.2.